Pactaron la rebaja salarial en vísperas de una devaluacion – Telecom le dobló el brazo a Foetra

PO 737 – 11/1/2002

Pactaron la rebaja salarial en vísperas de una devaluacion
Telecom le dobló el brazo a Foetra

Christian Rath

El viernes 4 de enero una asamblea general con la presencia de 800 compañeros votó a favor del acuerdo firmado una semana antes por la Directiva de Foetra Buenos Aires con Telecom. Este determina una rebaja salarial de un 4% efectivo, entre 25 y 40 pesos, ofreciendo en compensación una rebaja horaria de 45 minutos y el compromiso de reincorporar a los 413 trabajadores despedidos en diciembre pasado. El acuerdo no fija ningún compromiso de estabilidad laboral. Por lo demás, integra a los trabajadores de Call Center a la representación del sindicato bonaerense, sin modificación de su convenio, muy por debajo del de Foetra, y cede a la patronal una suma del orden de los 400.000 pesos del monto total de aporte patronal por “capacitación” y otros conceptos que debía recibir Foetra Buenos Aires, un aporte en litigio hasta ahora con la Federación (Foessitra), en manos de la burocracia oficial de la CGT.

La Comisión Directiva hizo una encendida defensa del acuerdo alegando que permitía en medio de la crisis la reincorporación de los compañeros, una buena parte de los cuales estaba en la asamblea. Pero no dijo que había cedido en medio del clima favorable de una rebelión popular y cuando todos los privatizadores se encuentran en retroceso. Se comparó el acuerdo con el firmado por Foessitra, que establecía, ante un conflicto similar, una rebaja salarial mucho más profunda. La Directiva tomó la iniciativa de criticar la “metodología” empleada por ella misma, concretamente no haber sometido el acuerdo a la aprobación previa de la asamblea, sin recordar en lo más mínimo que tenía prohibido actuar de esta manera, porque una Asamblea General del gremio, realizada días antes, ya le había dado mandato, no para firmar rebajas salariales, sino para ocupar los edificios contra cualquier despido que se fundara en un rechazo a la rebaja salarial. La lucha por la reincorporación de los compañeros había sido fortalecida, además, por la victoria de los pasantes de Telefónica, que luego de 100 horas de ocupación de edificios, habían arrancado la prórroga por un año de las pasantías de 116 compañeros y la incorporación como efectivos de los despedidos y todos los “antiguos”, una victoria en toda la línea.

Cerca de 700 trabajadores votaron a favor del acuerdo de rebaja salarial, una minoría se opuso y cerca de un centenar se refugió en la abstención o el no voto.

Crisis

La dirección de Foetra Buenos Aires, en este conflicto de l os pasantes, había mostrado que su política no era dar la pelea en defensa de los despedidos. No respaldó la ocupación de edificios (que fue defendida y votada, en minoría, por los integrantes del Polo Obrero) y sólo se hizo presente a la hora de firmar el acuerdo de victoria. Fue un antecedente de la aceptación de la rebaja salarial.

Sin embargo, la política justa para enfrentar la ofensiva patronal es la que fijaron los pasantes, no la dirección de Foetra. El argumento de parar los despidos negociando la baja de salarios es aceptar el chantaje patronal que busca, justamente, apoyarse en la quiebra industrial y la recesión para producir una caída histórica de los salarios a cambio de nada. Por algo Telecom no quiso firmar compromiso alguno en cuanto a no despedir y habilitó, con acuerdo de Foetra, una nueva lista de retiros voluntarios.

La burocracia en cualquiera de sus vertientes (UOM, Smata, CTA, gremios de la CGT disidente) ha tenido como política la firma de acuerdos de esta índole en nombre de “preservar la ocupación”. El fracaso está a la vista, si se aprecian los datos sobre desocupación en la industria y en las propias plantas afectadas por los acuerdos.

La mayoría de la dirección de Foetra Buenos Aires que está compartida entre el MTA y la CTA, no asumió el mandato de asamblea de responder a los despidos con la huelga con ocupación de edificios. La dirección de Foetra no quiso emplear una disposición de lucha que, en las dos batallas en las que se empeñó a fondo, arrancó victorias: hablamos de la huelga “en seco” ante los despidos en Telefónica a mediados del año pasado y, luego, de la ocupación llevada adelante por los pasantes aun sin el apoyo de la Directiva.

El pacto de Foetra Buenos Aires con Telecom se integra en la línea política de la CTA y la CGT disidente, que apoyaron la tregua primero con Rodríguez Saá, y ahora apoyan a Duhalde.

La batalla está planteada igual

El acuerdo divide al gremio en dos convenios, establece un mal precedente para los trabajadores de Telefónica y se firmó en plena devaluación monetaria, cuando está planteado el aumento de salarios para cubrir los aumentos de precios y nunca una rebaja.

Por estas razones las consignas de un básico mínimo equivalente a 600 dólares, junto a la escala móvil de salarios y la prohibición de despidos, tienen absoluta vigencia y deben llevar a reclamar la denuncia de los convenios vigentes y la exigencia de un convenio único, que abarque incluso a los compañeros de empresas tercerizadas. Esto no se logra si no se prepara al gremio para la huelga general.

Las telefónicas están en una operación de chantaje, exigiendo una compensación por la desdolarización de las tarifas, una expresión mayúscula de saqueo luego del saqueo. En una década las empresas telefónicas se han desprendido de más de 10.000 trabajadores, los niveles de productividad han crecido en más de un 500%, superando a los de países imperialistas. La relación entre beneficios obtenidos y patrimonio neto llegó al 20% en gran parte de la década, un “exceso” para cualquier grupo capitalista, y esto según los informes (truchos) de las propias empresas. La lucha de los telefónicos supone un combate político contra los grandes saqueadores de la nación, de los que Telecom y Telefónica son emblema.

El Polo Obrero fue la única corriente que se opuso al acuerdo e hizo conocer su posición a todo el gremio. IU (MST) llamó a apoyarlo considerándolo una “victoria”.

Share Button

Impactos: 396

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *